Sentir que sales. Que ya está. Que estás fuera. Cuando la felicidad de estar lejos, perdido y a tu poder se mezcla con la adrenalina de esa emoción.
Estar con tus amigos y no parar de reír. Sonreír por las idioteces mas tontas del mundo. Hacer chistes verdes y reírte de ti mismo.
O cuando estás solo en tu casa, te pones a escuchar tu música preferida y empiezas a hacer el idiota.
Eso se llama sentirse infinito.
Buenas.
ResponderEliminarEs un placer bucear por tu blog y descubrir entradas tan interesantes. Nos quedamos como seguidores y acompañantes. Te invitamos a nuestro blog: http://vivoentijyp.blogspot.com
Un saludo.
Samu.